Palabra...¡Ay palabra Madre!
La que succionando su seno
saciaba nuestro hambre.
¡Ah de la palabra Padre!
Donde concebimos en sus sudores
la fuerza y el coraje.
¿Dónde están esas bocas?
¡Esas, de mi lenguaje!
Donde abrazamos la lucha,
donde no duerme nuestro linaje.
¿Están sus lenguas acaso
trenzando el amor en los versos?
¿Serán los monosílabos y las frases
las que logren estos enlaces?
Serán nuestras pieles lo diverso
el mágico color de un renacer,
donde labrar la palabra
sea un limpio amanecer.
22.06.10
Excelente!!!
ResponderEliminarSaludos cordiales
Saludos cordiales Mistral, muchas gracias.
ResponderEliminar